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Know Your Rights
Source: El Diario
Subject: Health Justice & Access
Type: Media Coverage

Aquí no hay quien respire

"¡Múdense
de su edificio!"

Esto es lo
que han empezado a recetar algunos médicos de Nueva York a personas que padecen de asma.

Según
estos doctores, la contaminación dentro de las viviendas proveniente de hongos,
ratas y cucarachas, entre otros factores, es la principal causa del alarmante aumento de
enfermos de asma en la ciudad de Nueva York.

En el
hospital Woodhull Medical Center de Brooklyn, un equipo de médicos de más de 10
hospitales de la ciudad, junto a oficiales de la Asociación Americana del
Pulmón, declaró una crisis de asma en la ciudad, debido al constante aumento de
hospitalizaciones por esta enfermedad.

Los
médicos urgieron a la Ciudad a actuar para mejorar las condiciones que agravan
la salud de los asmáticos.

El doctor
José Mejía, jefe del Departamento de Medicina y Enfermedades Pulmonares del
Woodhull Medical Center, reveló que el asma afecta a más de un millón de
neoyorquinos cada día, 300 mil de los cuales son niños.

"Se ha
demostrado que el asma en Nueva York va en aumento durante todo el año, lo que
quiere decir que la calidad del ambiente dentro de la vivienda es importante",
dijo Mejía, quien explicó que los factores que más agravan la enfermedad dentro
de la vivienda son el polvo, las cucarachas y los excrementos de animales, así
como el humo del cigarrillo y los hongos que se producen por la humedad.

"En todos
los barrios, y no sólo de Brooklyn, el asma es
la causa número uno de que los niños falten a la escuela", dijo el médico.

Las
hospitalizaciones de niños con asma en el norte de Brooklyn, East Harlem y el
sur de El Bronx son 10 veces más altas que en el resto de la ciudad, según
reveló el doctor Eadward Fishkin, del Woodhull North Brooklyn Health Network.

Por su
parte, el doctor Bob Morrow, del
hospital Montefiore y la Escuela de Medicina Albert Einstein, reveló cerca de
un 80% de sus pacientes asmáticos reside en apartamentos en condiciones que
empeoran la enfermedad.

"Los
efectos de vivir cerca de infecciones de hongos, roedores y cucarachas no se
deben desestimar. Si hay una receta que yo pueda darle a pacientes en tales
condiciones sería la de mudarse de sus edificios", dijo Morrow.

"Mis
doctores me dicen que tienen que mejorar las condiciones en que vivo, o mudarme
del apartamento", dijo Elizabeth Mendoza,
quien reside en un sótano en Sunset Park, Brooklyn, y
cuya hija y sobrina son asmáticas. Mendoza
dijo que para que le limpien el moho de su apartamento tuvo que llevar al
casero a corte.

La
Asociación Americana del Pulmón y los galenos le hicieron un llamado ayer a la
Ciudad, para que adopte un plan de cinco puntos a fin de eliminar el riesgo de
asma por la contaminación en la vivienda, entre ellos el establecimiento de un
Código de Salud para la remoción de moho en las residencias; el desarrollo de
reglas para acabar con los bichos que empeoran el asma sin el uso de pesticidas
tóxicos; y la reclasificación como violación C (peligro inmediato) en lugar de
B (peligrosa) las violaciones a los códigos de Vivienda por la infección de
hongos y roedores en las viviendas.