Cuando hoy el reloj marque la medianoche, los primos mexicanos Manuel Pineda y Jesús Pérez desearían tener una sensación de tranquilidad para decir, con total propiedad: "misión cumplida".
Por eso ayer en Brooklyn, no sólo participaron de una marcha por los derechos de los inmigrantes, sino que también se encargaron de decirle a cada paisano que el Gran Paro Americano 2006 es un evento que beneficia a todos y que lo que se pide hoy, representa estabilidad para el futuro.
Hay que apoyar la causa de los inmigrantes carnal, no se vale que algunos se queden haciendo su vida normal y vayan a trabajar para luego pedir lo que vamos a cosechar. Sumarse al paro es la única forma de hacer presión lograr que nos respeten, dijo Pineda, que portaba una pancarta que decía somos América.
Junto a él, su primo, algo más tímido, agregó que "los que tengan miedo a perder sus empleos que pidan permiso.
Pineda y Pérez, añadieron que lo único que se busca es mejores condiciones laborales y calidad de vida. "No protestamos por ser antiamericanos, todo lo contrario, queremos salir de las sombras y tener papeles, afirmó Pineda.
Los trabajadores indocumentados no son los únicos interesados en el evento que promueve un boicot económico en un día que no es feriado en Estados Unidos, a diferencia de lo que ocurre en gran parte del mundo por el Día del Trabajo.
He vivido en este vecindario por 38 anos. Tengo mis papeles, pero detesto a los racistas. Este país está hecho por inmigrantes y desconocer eso es ser ignorante, señaló la dominicana Aideé Carrasco, quien estará hoy frente a la Estatua de la Libertad, durante un evento donde decenas de personas se tomaran de las manos para formar cadenas humanas de solidaridad.
Otras cadenas humanas están pautadas en los vecindarios de Queens, El Barrio y El Bronx. Además, varios comerciantes, restaurantes y fábricas han anunciado el cese de sus operaciones. En el Estado Jardín, por ejemplo, diez compañías de buses dejaran de funcionar y en el Harlem hispano una treintena de locales cerrarán. En Hempstead, Long Island, se realizará una concentración en la avenida Fulton y Washington Street. Más tarde los manifestantes se dirigirán a Manhattan, para participar de la protesta en Union Square.
El respaldo y la adhesión viene, incluso, de aquellos que ya han ganado sus luchas personales. "Si tu ganas un caso eso no significa que vas a dejar de apoyar, dijo José Henríquez, un empleado de una tienda de zapatos que ayudó a sus compañeros a sindicalizarse y exigir mejoras laborales. El abuso laboral que paso conmigo, puede pasar mañana en otra tienda y por eso hay que seguir presionando, afirmó Henríquez.
Existe la posibilidad de ver algo grande en el Congreso, por eso tenemos que mantener la solidaridad entre los indocumentados y los ciudadanos. porque toda la comunidad se va afectada por no tener un reforma migratoria. Tenemos que ser un frente común solidario, dijo Andrew Friedman, de la organización Se Hace Camino al Andar.
Mañana (hoy) me levantaré bien temprano y diré presente en las movilizaciones por una reforma migratoria justa y amplia. Espero acostarme con la conciencia tranquila concluyó Pineda.