Nueva York — Negociando con el Concejo Municipal para
evitar una ley de traducción en las escuelas que le hubiese costado a la Ciudad
20 millones de dólares, ayer el alcalde Michael Bloomberg y su Comisionado de
Educación anunciaron nuevas regulaciones para proveer traducción para padres de
estudiantes, que según ambas partes incorporan casi todas las provisiones de la
ley del Concejo que fue vetada por Bloomberg.
Las regulaciones anunciadas ayer, que fueron laureadas como un logro para la
comunidad inmigrante, sumaran 2 millones de dólares a los 10 millones que el
Departamento de Educación ya destina a traducción e interpretación. La mayor
parte de los fondos adicionales se destinarán a proporcionar más intérpretes
para los padres del 40 por ciento del alumnado que son extranjeros, aunque
Bloomberg dijo que la Ciudad no puede permitirse emplear intérpretes a tiempo
completo en los colegios.
La nueva reglamentación proporcionará a todas las escuelas parámetros claros de
lo que se debe traducir -como por ejemplo formularios de matrícula, cartilla de
calificaciones y avisos de salud y seguridad- y en cuándo los padres podrán
tener acceso a un intérprete.
"Qué bueno que cuando vaya a la escuela de mi hijo no voy a tener que
sentir vergüenza, miedo y frustración como he sentido en el pasado", dijo
Catalina Martínez, una madre poblana cuyo hijo cursa segundo grado.
Hasta ahora, como apuntó la presidenta del Concejo, Christine Quinn, muchos
padres tenían que sacar a sus hijos del aula para hacer de intérpretes pro
bono. "Eso es como poner a un elefante a cargo del tenderete de
cacahuetes".
Entre las medidas anunciadas por el Alcalde también se creará un comité de
activistas que cada seis meses revisará la implementación de la nuevas
regulaciones, y obligará al Departamentos de Educación a informar al Concejo de
cuando no pueda cumplir los reglamentos por falta de fondos.
El acuerdo entre el Alcalde y el Concejo evitó la que hubiese sido la primera
anulación de un veto legislativo del Alcalde bajo la nueva presidencia
legislativa, y fue calificado por Bloomberg como "un importante paso
adelante en la relación entre el Concejo y la Administración". El Alcalde vetó
la ley de Equidad en la Educación el mes pasado, y el Concejo había dicho que
estaba preparado para anular el veto en su reunión plenaria este miércoles.
En ocho
idiomas
La Unidad de Traducción del Departamento de Educación tienen un presupuesto de
10 millones de dólares, que se incrementa en dos millones con la decisión de
ayer tomada entre la Alcaldía y el Concejo Municipal. Esta Unidad traduce más
de 900 tipos de documentos diferentes en ocho idiomas: español, ruso, chino,
bengalí, árabe, haitiano, coreano y urdú.
Se estima que una tercera parte de la población de la Gran Manzana es de origen
extranjero y que más del 40 por ciento de los alumnos de la ciudad hablan con
sus padres en sus hogares otro idioma diferente al inglés.