NUEVA YORK Adela Valdez dejó a sus cuatro hijos en México en búsqueda de una mejor vida para ellosuna casita, un terreno en su país nativo.
Sin embargo, en Nueva York, la madre soltera se enfrentó a la dura realidad que atraviesan los trabajadores indocumentados que son explotados por sus empleadores.
Yo tuve que acercarme a los mercados y pedir las manzanas que estaban botando, dijo Valdez, que trabajó cociendo pantallas de lámpara para la compañía trans.LUXE Lighting en Manhattan hasta que este empleador dejó de pagarle. Trabajando yo tuve que comer basura. Eso es muy fuerte lo que sufrí, contó la madre mexicana en una entrevista telefónica con EL DIARIO/LA PRENSA.
La amargura de miles de trabajadores como Valdez se convirtió en felicidad ayer cuando el gobernador David Paterson firmó legislación que ayudará a prevenir el robo de salarios y penalizará a los malos empleadores, el Acta de Ley para Prevenir el Robo de Salarios (Wage Theft Prevention Act).
Valdez, quien acudió a la organización Make the Road New York para luchar por sus sueldos, y que eventualmente los recuperó, lloró de la emoción ayer. Ella dijo: Es algo muy bueno. Es como ser niño y ver que mamá viene corriendo.
El gobernador Paterson firmó la ley ayer en su oficina en Manhattan en una reunión a la que asistieron trabajadores y organizadores de Make the Road Nueva York, la senadora estatal Diane Savino, el asambeísta Carl Heastie y Stuart Appelbaum, además de dos líderes de sindicatos.
El gobernador Paterson dijo: En un momento cuando tantos neoyorquinos están viviendo de cheque a cheque, es sumamente importante que protegamos su derecho de recibir el dinero por que han trabajado.
La sub directora de Make the Road New York, Deborah Axt, señaló que firmando esta ley el estado finalmente ha hecho un compromiso a defender a los trabajadores, castigar a los malos empleadores y usar el poder del estado para garantizar tratamiento justo para los trabajadores vulnerables de bajos sueldos.
Los empleadores fallan en pagar un total mil millones de dólares a sus empleados anualmente en la ciudad de Nueva York, según datos del National Employment Law Project dados a conocer por el Concejo Municipal.
Un empleado de bajos ingresos típicamente pierde alrededor de 3.000 dólares anualmente por robo de salarios, o el 15% de sus ingresos.
Además, las consecuencias para empleadores que no cumplen con la ley son menores.
Además de aumentar las penalidades para los malos empleadores, la ley protegerá a las personas que denuncian los malos empleadores y ayudará al Departamento de Trabajo y las cortes a investigar denuncias de robo de salaries.
Adela Valdez, la trabajadora mexicana, agregó: Estando en este país, uno es en la calle como una pelota. Uno lo patea y otro lo para y vuelve hacer lo mismo. Cuando ya no sirve, la botan por allí Ahora podemos decir que hay alguien que nos defienda.