Todos los días en nuestro estado, nuestros vecinos indocumentados que enfrentan enfermedades y lesiones se encuentran en una posición imposible.

Nuestro estado tiene la oportunidad de expandir sustancialmente la cobertura de salud para los neoyorquinos, y no le costaría ni un centavo a Nueva York. La semana pasada, el Senado estatal aprobó la legislación Cobertura para Todos, que ampliaría la cobertura del Plan Esencial a los neoyorquinos de bajos ingresos, independientemente de su estatus migratorio. Con la Asamblea Estatal programada para regresar por dos días legislativos más esta semana, la cámara tiene la oportunidad de hacer lo correcto y traer a casa una victoria histórica para los neoyorquinos.

La pandemia ha reforzado para todos nosotros que el acceso a la cobertura y atención médica es a menudo una cuestión de vida o muerte, especialmente para nuestros vecinos más vulnerables. El proyecto de ley Cobertura para Todos ofrece una oportunidad sin precedentes para cerrar la brecha más grande en la cobertura entre los neoyorquinos y mejorar el sistema de atención médica en todo el estado. Al mismo tiempo, el proyecto de ley generaría ahorros sustanciales para el estado e impulsaría la economía.

Aprobar Cobertura para Todos es un imperativo moral. Todos los días en nuestro estado, nuestros vecinos indocumentados que enfrentan enfermedades y lesiones se encuentran en una posición imposible. Sin seguro de salud, no pueden permitirse el lujo de buscar la atención necesaria y preventiva, prolongando su enfermedad, sufrimiento o incluso poniendo en riesgo sus vidas. Nuestros vecinos sin seguro temen facturas médicas exorbitantes que los llevarían a una deuda interminable.