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Know Your Rights
Source: El Diario
Subject: Profiles of MRNY
Type: Media Coverage

Protejamos a nuestros jóvenes de la adicción al fumar

Yo no fumo. La gente se sorprende cuando le digo que nunca he fumado ni un cigarro, porque muchos han fumado en algún momento. La mayoría de ellos probaron su primer cigarro cuando eran jóvenes.

La ciudad y el estado de Nueva York tienen leyes para protegernos de la inhalación indirecta de humo. Pero el gobierno no es el único actor importante. Hay que reconocer el papel de las corporaciones que venden los productos de tabaco. Gastan miles de millones de dólares cada año para promocionar sus productos y aunque hay limitaciones legales en cómo pueden promocionar sus marcas, estas corporaciones son muy creativas. Por ejemplo, gastan mucho dinero para asegurar que sus productos ocupan un lugar prominente en los supermercados, las farmacias y las tienditas. Tienen contratos con los negocios para que sus productos se encuentren al nivel de la vista de los compradores. Si nunca te has dado cuenta, empieza a fijar y verás que es cierto.

Aunque cada quien puede decidir si fumar o no fumar, tenemos la responsabilidad de proteger a los sectores de la población más vulnerables. En este caso me refiero a los jóvenes: nueve de cada 10 fumadores empezaron a fumar antes de los 18 años. Y aunque los jóvenes no pueden comprar cigarros en muchas tiendas, son impactados por la promoción de los cigarros allí. Según el Instituto Nacional del Cáncer, exposición a la promoción de cigarros causa que los jóvenes que no fuman empiecen a fumar.

Antes de reflexionar sobre el papel de las corporaciones de tabaco, debatía entre si el tema de fumar era una decisión personal o de la salud pública. Pero ahora lo veo como una cuestión de justicia social.

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