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Know Your Rights
Source: El Diario
Subject: Workplace Justice
Type: Media Coverage

Denuncian Explotación en Supermercado

Nueva
York — Los empacadores de un supermercado de Bushwick están haciendo su trabajo
sin recibir salario, dependiendo para vivir sólo de las escasas propinas que
les dan los clientes.

Según
la denuncia que harán hoy domingo varias organizaciones, los empacadores en el
supermercado Associated, en la calle Knickerbocker, también trabajan largas
horas y muchas veces laboran la semana entera, siete días sin descanso.

La
organizadora laboral Laura Tapia dijo que hay muchos problemas en el
supermercado, "pero el que más me pega a mí y el que más yo creo que le pega a
todos, es que esta gente tiene trabajando -gente mayor- empacando después de la
cajera, empacando los productos después de que la gente compra, en bolsas, y la
mayor parte de ellos no reciben ningún pago; solamente lo que la propina da".

Bushwick
"es un vecindario muy pobre, que la gente no da propina", agregó Tapia. "Ellos
hacen un promedio de diez pesos" al día, dijo la organizadora. "A veces nada".

Un
trabajador del supermercado dijo que los compradores dan de propina "a veces
cincuenta centavos, a veces una peseta".

El trabajador
indicó que al parecer en el pasado los empacadores recibían un pago de $20
semanales pero que en algún momento se eliminó ese pago. "Ellos deberían estar
en el payroll como empleados", dijo el trabajador, que calcula que los
empacadores ganan, cuando mucho, $150 a la semana.

"Yo
estoy segura que muchas veces se han quedado sin comer", dijo Tapia, quien
trabaja para el sindicato RWDSU, de trabajadores de tiendas. El sindicato y la
organización Se Hace Camino al Andar llevan más de un año en campaña para subir
los salarios de los obreros a lo largo de la avenida Knickerbocker, que es el
principal corredor comercial del vecindario.

Los
organizadores de la campaña dijeron que hoy van a llamar a los vecinos de
Bushwick a participar en un boicot contra el Associated, una táctica que ya han
utilizado contra otros negocios de la avenida.

El
gerente del supermercado, Arnaldo Maldonado, dijo ayer que dudaba que un boicot
pueda ser exitoso "porque la gente esta contenta también con los precios que
nosotros tenemos".

"Los
especiales están buenos aquí", dijo Maldonado.

Tapia,
la organizadora del sindicato, dijo por su parte que es cierto que la clientela
del supermercado va por los buenos precios, "pero también si la gente sabe que
por dar esos especiales la gente está explotada, también la gente va a tener
conciencia, y va a decir ‘ya no compro si hay ese problema’"

Maldonado,
el gerente del supermercado, negó que los empacadores estén sin salario.

"Aquí
está todo el mundo bien, a todos se les paga bien", dijo.

"Yo
no sé por qué están haciendo esa cosa", agregó, diciendo que ninguno de los
empleados está descontento ni pidiendo boicot.

Andrew Friedman, de Se Hace Camino al
Andar
, dijo que los dueños del
Associated habían aceptado participar en una reunión el viernes para discutir
los problemas en el supermercado, pero que a última hora cancelaron la cita.
"Parece que no están en ánimo de negociar. Creo que vamos a tener que
mostrarles que estamos hablando en serio y que ellos ganan su plata gracias a
la comunidad", dijo Friedman.

Los
organizadores de la protesta también han llevado la querella ante la oficina
del procurador (fiscal estatal), que en el pasado ha presentado demandas contra
otras cadenas de supermercados por casos de falta de pago.

En
un caso presentado hace seis años, la oficina del procurador obtuvo un acuerdo
de pago de $3 millones en salarios atrasados a los inmigrantes africanos que
hacían entregas de mercancía en los supermercados Food Emporium. La cadena
había indicado que los trabajadores —con salarios de poco más de un dólar por
hora— no eran sus empleados, sino que trabajaban para un subcontratista,
argumento que fue rechazado por el procurador. Un caso similar se llevó contra
la cadena Gristede’s en el 2003.

La
oficina del procurador argumentó en ambos casos que los trabajadores que hacían
entregas estaban protegidos por las leyes del salario mínimo. En Nueva York
actualmente el salario mínimo es de $6,75 por hora para la mayoría de los
trabajadores. Los que reciben propinas deben tener un salario mínimo de entre
$4,35 y $5,10 de acuerdo a la labor que realicen. La ley también estipula pagos
de tiempo y medio cuando se trabajan horas extra (overtime). En el caso del
Associated, los que están llamando al boicot también alegan que no se está pagando
la cantidad que corresponde por las horas extra.