El Concejo Municipal someterá el 17 de agosto una propuesta de ley que podría anular la presencia de autoridades migratorias en la prisión de Rikers Island.
Las grandes coaliciones pro-inmigrantes de la ciudad respaldan la iniciativa, la cual calificaron como urgente después de tres años de trabajo.
Javier Valdés, codirector de Se Hace Camino Nueva York, explicó que las comunidades latina y afrocaribeña son mayormente afectadas por deportaciones innecesarias. El activista comentó que inmigrantes indocumentados son interrogados por oficiales del Servicio de Inmigración y Control de Adunas ICE, al ingresar a Rikers Island.
"Latinos con cargos menores, como usar el servicio del tren sin pagar por él, están siendo deportados injustamente", afirmó Valdés.
Según cifras del Concejo Municipal, el 20.9% de presos entregados al ICE en 2009, habían cometido un delito menor como su mayor crimen.
Trascendió que oficiales de Rikers Island tienen la autoridad de retener por 48 horas a inmigrantes indocumentados después de su fecha de liberación, para entregarlos a ICE.
El concejal Ydanis Rodríguez, comentó que el Concejo tiene expectativas positivas respecto a la aprobación de la ley.
"Confiamos en que el alcalde Bloomberg accederá a eliminar la oficina de ICE en Rikers Island, así como aceptó su presencia en esta prisión".
Rodríguez aseguró que las grandes coaliciones pro-inmigrantes, entre ellas Se Hace Camino Nueva York y New York Immigration Coalition NYC, están impulsando la propuesta de ley, por lo que existe una gran posibilidad de "brincar un veto" si fuera necesario.
En el Concejo, los ediles Melissa Mark-Viverito y Daniel Dromm patrocinaron la medida que recibió el respaldo de la presidenta del cuerpo legislativo Christine Quinn.
Andrés García, de New Immigrant Community Empowerment NICE, comentó "Autoridades migratorias deben limitarse a procesos de inmigración. Los procesos legales son un asunto independiente".
NICE refrendó su apoyo al Concejo Municipal y destacó que la eliminación de autoridades migratorias de la prisión de Rikers Island es un paso tan importante como el que se dio en junio, cuando el estado de Nueva York dejó de participar en el programa Comunidades Seguras.
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